Península Valdés
Puerto Madryn
Duración: Día Entero
Salida: 07:30
Regreso: 18:00
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Operabilidad: Todo el año

Observaciones: Se abona entrada a la reserva. Disponible todo el año. La excursión se organiza en función a las condiciones climáticas y época del año. Temporada de ballenas: de mediados de Junio a mediados de Diciembre. En los meses de Junio y Diciembre no son garantizados los avistajes de ballenas, por la presencia de pocos ejemplares.
Partimos temprano hacia el norte para visitar el Área Natural Protegida de Península Valdés, nos encontramos en primer lugar con el centro de interpretación Istmo Ameghino, ubicado al ingreso de la reserva. Desde allí tendremos la posibilidad de observar ambos golfos al mismo tiempo; y desde su mirador tendremos una primera noción de las características geográficas de la península, sus accidentes costeros y de la Isla de los Pájaros.
Siguiendo viaje, distante a 100 kms. de Puerto Madryn, encontramos la villa turística de Puerto Pirámides. Desde este puerto natural podemos, opcionalmente, realizar el avistaje de ballenas en embarcaciones preparadas especialmente. Durante la época en que no hay ballenas, es decir el verano, se puede llegar a realizar ocasionalmente un avistaje de fauna marina para ver lobos marinos, diversas aves marinas y tal vez delfines oscuros.
Continuando el recorrido se visitará Caleta Valdés y Punta Cantor, lugares con magníficos paisajes, desde cuyos miradores sobre los acantilados podrá observarse un apostadero de elefantes marinos y una pequeña pingüinera.
Luego, dependiendo la época del año y la distribución de fauna costera, se puede continuar hacia Punta Norte, apostadero de lobos marinos. Lugar reconocido por sus costas particularmente accidentadas y por supuesto por la posibilidad de ver merodeos o ataques de orcas, que eventualmente patrullan la zona en busca de nuevas presas.
Caso contrario esta última parada es suplantada por Punta Delgada, apostadero de elefantes marinos, ubicado hacia el sur. Posee una vista muy particular, acompañada por un faro y las instalaciones de la estancia.
Finalmente en horas de la tarde regresaremos al hotel luego de recorrer más de 400km, mitad de ripio y mitad de asfalto, teniendo una intensa y grata jornada en la cual también cruzaremos animales terrestres autóctonos en el camino.